En contra de lo que predica el actual Gobierno en funciones, José Luis Almazán (Madrid, 1978), vicepresidente de la Plataforma de Inversores Portuarios Españoles (Pipe) cree que el balance de legislatura en los Puertos del Estado ha sido pobre. «Se han hecho pocas cosas por la competitividad de los puertos», señala en una entrevista con EXPANSIÓN.
En su opinión, la nueva legislatura tiene que centrarse en resolver asuntos pendientes y replantear el modelo de gestión portuaria en su con junto. «Liberalizar los servicios de la estiba, mejorar la competitividad teniendo en cuenta la actual sobrecapacidad y zanjar las peleas entre puertos a través de rebajas de tasas son asuntos que la nueva Administración debería abordar en los próximos cuatro años», indica Almazán que, además, es el responsable en España del fondo Queensland Investment Corporation.
En 2015, los ingresos recurrentes del sistema portuario llegaron a 1.000millones, co una generación de caja de entre 450 millones y 500 millones de euros, mientras que el resultado bruto de explotación (ebitda) ascendió a unos 550 millones, con una caja a final de año de 1.300 millones. El beneficio de Puertos del Estado se situará en 200 millones con un récord del tráfico de mercancías de 500 millones de toneladas.